viernes, 28 de octubre de 2011

..nuestra herencia...

Rodrigo Frolaz conde de Bardulia.. Castilla.Rodrigo Frolaz fue un supuesto conde de Bardulia. Es un personaje legendario, sin base histórica que según la tradición dominaba en la marca oriental del Reino de Asturias desde 762 hasta el año 800.
Se le supone hijo de Fruela, duque de Cantabria y conde de Bardulia (hermano de Alfonso I el Católico), y hermano de los reyes asturianos Aurelio (768-774) y Bermudo I el Diácono (788-791).
El primer conde de Castilla del que se tiene constancia histórica y documental es Rodrigo.

Los godos desde sus orígenes bálticos hasta Alarico I

En el año 379 d. C., decenas de miles de godos se apiñaban al otro lado de la frontera romana danubiana en petición de asilo al Imperio Romano oriental. La insoportable presión ejercida por otro pueblo bárbaro, el huno, les había llevado a abandonar sus tierras del mar negro, a donde habían llegado procedentes del mar Báltico. El emperador de Oriente, Valente, cometió el gravísimo error de concederlas asilo. Dos años después, este emperador y su formidable ejército serían derrotados por los godos en la batalla de Adrianópolis.
Décadas más tarde, estos germanos llegaron a ser los primeros en establecer un Reino proprio independiente dentro del Imperio: un cáncer que contribuiría poderosamente a la caída del imperio de Occidente.
Este libro narra su historia previa al cruce del Danubio, llegando hasta la muerte de Alarico I (410), bajo cuyo liderazgo se formó el grupo visigodo: una odisea histórica apasionante.
Libreria Europa.

La batalla de Clavijo

La batalla de Clavijo, una de las más célebres batallas de la Reconquista, se habría producido en el denominado Campo de la Matanza, en las cercanías de Clavijo, La Rioja (España), fechada el 23 de mayo del año 844. Sus características míticas (la intervención milagrosa del apóstol Santiago), su condición de justificación del Voto de Santiago, y la revisión que desde el siglo XVIII supuso la crítica historiográfica de Juan Francisco Masdeu; la han hecho ser considerada en la actualidad más bien una batalla legendaria, cuya inclusión en las crónicas se debería al arzobispo Rodrigo Jiménez de Rada, y que incluiría, mezclándolos y mixtificándolos, datos de otras batallas de diferentes momentos y localizaciones, aunque es en grandes rasgos, la mitificación de la batalla de Albelda. No obstante, la batalla siguió siendo celebrada como un elemento de conformación de la historia nacional española. También es la referencia histórica que Enrique IV y posteriormente el resto de monarcas han empleado para la creación y confirmación de privilegios al Antiguo e Ilustre Solar de Tejada, único señorío que se ha mantenido desde entonces hasta la actualidad.
La batalla tendría su origen en la negativa de Ramiro I de Asturias a seguir pagando tributos a los emires árabes, con especial incidencia en el tributo de las cien Doncellas. Por ello las tropas cristianas, capitaneadas por Ramiro I, irían en busca de los musulmanes, con Abderramán II al mando, pero al llegar a Nájera y Albelda se verían rodeados por un numeroso ejército árabe formado por tropas de la península y por levas provenientes de la zona que correspondería actualmente con Marruecos, teniendo los cristianos que refugiarse en el castillo de Clavijo en Monte Laturce. Las crónicas cuentan que Ramiro I tuvo un sueño en el que aparecía el Apóstol Santiago, asegurando su presencia en la batalla, seguida de la victoria. De acuerdo con aquella leyenda, al día siguiente los ejércitos de Ramiro I, animados por la presencia del Apóstol montado en un corcel blanco, vencieron a sus oponentes
El día 25 de mayo en la ciudad de Calahorra el rey dictaría el voto de Santiago, comprometiendo a todos los cristianos de la Península a peregrinar a Santiago de Compostela portando ofrendas como agradecimiento al Apóstol por su intervención.
Con este suceso, el apóstol se convirtió en símbolo del combate contra el islam, siendo reconocido desde entonces como Santiago Matamoros.

El conde Garcia Fernandez defensor de la frontera del Duero

De muchas de sus campañas no nos dijeron nada los historiadores musulmanes, sin duda porque no fueron brillantes. Con tenacidad admirable, García cierra el paso al invasor y se queda solo: Vermudo ha pactado, Sancho Abarca se ha sometido, Borrell ha visto Barcelona saqueada e incendiada.
Comprende que le es imposible conservar las plazas alejadas, y así, decide en 984 retirarse a Sepúlveda abadonando Atienza. Ambas plazas se pierden tras la toma de Simancas.
Después de la aceifa de 987 sobre León, Vermudo se retira a Galicia, entonces García se presenta al otro lado del Cea con el intento de erigirse en defensor de aquella tierra desamparada por su señor legítimo.
En junio de 989 Almanzor, acompañado por su hijo Abd Allah ponen sitio a Gormaz, siendo rechazados . Hubo grandes pérdidas por ambos bandos:, falleciendo el obispo de Valpuesta Nuño Vela. Almanzor, que había sufrido la deserción de su propio hijo, ocupa Osma en agosto y Alcoba de la Torre en octubre, saqueando la comarca y ordenado la retirada ante la proximidad del invierno.
Al año siguiente, 990, Almanzor regresa para recuperar a su hijo, pero la frontera estaba bien defendida, entraba el otoño cuando se abrieron negociaciones: paz a cambio del hijo. García lo entrega siempre y cuando respetase su vida. No fue así y el 8 de septiembre Abd Allah fue decapitado. Aun así se mantiene la tregua hasta el 994, circunstancia que aprovecha Vermudo para regresar a León, agradecido toma por esposa a la infanta Elvira, hija del conde, probablemente en los últimos meses de 991.

Castella Vetula ,la vieja Castilla Norte

En castellano Castilla Vieja también llamada por la historiografía Castilla del Ebro, es el término que se emplea para designar el territorio primigenio de Castilla.
Su origen se encuentra en la Castella de principios del siglo IX que se forja en plena reconquista a los pies de la cordillera cantábrica. Cuando Ordoño I de Asturias encomienda al conde Rodrigo el gobierno de la marca oriental del reino (limitado al norte con el mar cantábrico), el condado puesto bajo el mando de Rodrigo se llamara Condado de Castilla, tomando su nombre de la primitiva Castella que posteriormente sería conocida como Castilla Vieja.
El territorio de la primitiva Castilla Vieja lo constituían las llanadas de los ríos Jerea y Nela y diversos valles como el de Valdivielso, Valdegovía, Tobalina y Manzanedo, el territorio comprendería todo el norte de la actual provincia de Burgos ocupando a grandes rasgos la comarca burgalesa de las Merindades.

Era Castilla la Vieja un puerto bien cerrado,
Non habia mas entrada de un solo forado;
Tovieron castellanos el puerto bien guardado,
Porque de toda España eso hobo fincado.


Todo el territorio de Castilla Vieja formaría una merindad del Reino de Castilla y posteriormente en las Edades Moderna y Contemporánea daría nombre a una región histórica
Etnicamente la Castella Vetula, era una tierra compuesta grosso modo y en esos tiempos, por el resultado de la etnogenesis de las poblaciones celtas originarias de la zona, los germano godos llegados siglos atrás asentados en todas esas tierras, y los vascos.
La mayor parte de las tumbas visigodas encontradas en España, coinciden precisamente con esa vieja Castilla. Donde si bien es cierto la capital del reino era Toledo, la mayor parte de los asentamientos militares y civiles estaban en la zona norte de la provincia de Autrigonia y zonas de la mitad norte de la Auraliola.
Precisamente por ser en épocas pasadas zonas de conflicto entre los godos y los cantabros y vascones al norte, y los francos del otro lado del pirineos.
La Castilla originaria, la Castilla Vetula, era una zona condal vinculada al reino de Leon, y anteriormente al reino de Asturias en sus zonas mas norteñas.*****
Formando a su vez parte del territorio llamado Gallaecia por los musulmanes. Recordemos que los propios moros en sus escritos, nombran al Cid con el nombre descalificativo de: “ese perro de los gallegos”. Dado que el reino de Asturias había nacido y heredado la zona territorial de la provincia de Gallaecia de los romanos.
De tal forma que hasta el siglo XI, Gallaecia era un territorio (no reino) que comprendía desde la Galicia actual, pasando por Leon, Asturias (reino y capital), Cantabria, y Castilla Vieja.
En los tiempos de la expansión del reino hacia el sur, los condes fueron repoblando las nuevas tierras con gentes llegadas de Cantabria, Asturias y Vasconia.


No hay comentarios:

Publicar un comentario